¿Que te quieres ir de visita un fin de semana a Berlín y no sabes qué ver además del muro, el parlamento, la puerta de Brandenburgo, el campo de concentración, la torre de televisión, los museos, los mercadillos, etc....? Pues aquí te dejamos una crónica de un garito guapísimo para que no eches de menos el chute de metal de cada fin de semana.
Muchos dirán después de tomar algo aquí que ya pueden morir agusto, y es que a este bar no le falta de nada. Es un café-bar tributo a Rob Halford, de ahí su nombre, cuyo dueño podría pasarse por el hermano gemelo del cantante de Judas Priest, tanto por su calva como por su porte ¡Y es que está cuadrado, el tío! Bueno, a lo que vamos, aquí os dejamos una crónica recién salida del horno para el deleite de todos nuestros lectores ¡Que aproveche, leche!
- Local: Es bastante grande, con dos salas y una intermedia a la que le han puesto un par de sofás la mar de cómodos, con un futbolín de esos de plástico (que no vale para nada) y una diana electrónica para echar alguna partidilla. La sala principal, o sea la de entrada, está muy maqueada con pósters, fotos varias, carátulas de cds, de conciertos, un dibujo del Halford en moto y una pared de amplificadores. La otra sala tiene tres billares y una cara en relieve del Halford de 3x3 (vaaaale, he exagerado, pero es muy tocha e impresiona).
- Instalaciones: Es predominantemente un bar de tranqui, vamos que nada de pista de baile ni nada de eso. Hay mesas, sillas y sillones (la maaaar de cómodos, oye) y una pantalla donde ponen videos musicales de toda clase. Tiene tres billares, un futbolín (de los cutres) y una diana para los más lúdicos. En la pantalla se ponen videos musicales de todo tipo, desde lo más clásico y ochenteno hasta la actualidad más extrema. Hay algún toque gótico, tipo unas calaveras, unas velas y demás, pero nada excesivo. La decoración metalera clásica es la predominante. Los baños están al final atravesando el local, muy limpios y amplios. Más que curiosa es la figura del Halford de 3 metros (y esta vez no exagero) a la entrada del local, ideal para hacerse una foto.
- Música: La música es variadilla, si bien el pincha se tira más por los clásicos de los 80 y 90. Irónicamente el heavy alemán no es muy conocido por aquí pero en este bar he escuchado desde los clásicos Blind Guardian o Manowar hasta un “The king of 1000 years” de ese Helloween del Legacy. Por descontado Judas Priest suena cada noche, además de grupos hard-rockeros como Withesnake, Alice Cooper, Mötley Crüe, etc, heavy clásico como Dio y Black Sabbath, metal de los 90 como Stratovarius y grupos más actuales de la rama del black metal alemán. Para hacerse una idea, suena de todo un poco sin salirse de madre, vamos.
- Precios: Lo que se lleva aquí es o bien la cerveza de barril o de botellín (depende de la marca entre 2 y 3 euros el medio litro), o bien cocktails (unos 5 euros) que tienen nombres de grupos jebis. Yo probé un Twisted Sister y un AC/DC que estaban muy buenos (mariconadas, sí, qué pasa, pero soy una nenaza :P), y un amigo se tomó un Mötorhead, una bomba de cocktail con tres tipos de Whisky de base. Si queréis probar algo intermedio, el Halford Special es la especialidad de la casa (como su nombre indica). Aparte de esto, se pueden tomar cubatas (llamados long drinks, a 3 euros la copita), chupitos variados (a 1 ó 3 euros) y copas de vino a un precio razonable.
- Horario: De lunes a domingo de 8 de la tarde hasta cierre (sobre las 5 más o menos).
- Comentario: Es un bar digno de visitar para cualquier amante del metal. En la entrada tienen toda una declaración de intenciones: una placa conmemorativa que reza "Rockcafé Halford – Un tributo al Dios del metal".
- ¿Cómo llegar?: Está en Boxhagenerstr. 19-20. Se puede llegar con S y U (cercanías y metro) en la parada de Warshauer strasse, con el U5 (metro) en la parada de Frankfurter Tor y con el tranvía 21 en la parada de Niederbarnimstrasse.
- Status: Visitado por el equipo de Jebi Mental.
- Web: http://www.halford-berlin.de
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12 de febrero de 2009
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1 comentario:
Hola , yo estuve hace 2 años en el bar y la verdad es que me gusto mucho , me traje unas camisetas del bar de recuerdo para mi y para unos cuantos amigos. El dueño es muy majo y estuvo charlando un buen rato con nosotros mostrandonos fotos con Rob y sus colecciones. Esta muy bien para pasar un buen rato , sobre todo despues de ver 17 mil museos y estar harto de salchichas , jejejejeje.... Un saludo del bajista de Estampida !!!
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